La historia de Ayrton
Ayrton aprendió sobre Reflejo a través de RAP hace tres años. Cuando escucho sobre la visión que tenían de enviar latinos y vio la oportunidad de trabajar para apoyarlos en la obra, quiso unirse. Aunque no sea misionero, siempre quiso ayudar en las misiones y le animo encontrar una manera de aportar para alcanzar a las etnias menos evangelizadas. Empezó trabajando en la página web y luego se enfocó más en el soporte técnico y la ciberseguridad.
Hoy en día el mundo nos está impulsando a ser más públicos con nuestra información y se está viviendo una época de libertinaje digital. En las misiones es importante tener otra cultura distinta, una que tenga concientización de la información pública y tener cuidado de no poner en riesgo la vida de los misioneros compartiendo información sensible que puede caer en las manos equivocadas.
Ayrton se enfoca en crear un sistema privado y seguro para facilitar la comunicación con los misioneros en contextos peligrosos. Las misiones es algo duro de valientes que nos pone en contexto que la obra realmente es un campo de batalla y debemos cuidarnos unos a otros. Una manera de hacer esto es poder crear una plataforma para compartir información como lo hace Ayrton.
Algo que él pudo aprender en este tiempo trabajando es que “todos podemos de alguna forma contribuir a la misión. Quizás a través de voluntariado, de experiencias o de apoyo.”