Las Naciones llegan a nosotros
Imagínate salir abruptamente de tu país, un territorio conocido por su contexto islámico radical, matices históricos y tradiciones conservadoras para llegar a un nuevo continente lleno de festividades, colores y música, dónde no puedes interactuar con los locales porque no conoces el idioma y las costumbres. ¿Podrías adaptarte fácilmente? ¿Crees que podrías soportar estar allí por tres años o más? ¿Qué te pondrías hacer si tuvieras que vivir esto?
La verdad, lo anterior NO corresponde a ningún escenario simulado, hace parte de la realidad de más de 300 familias afganas que han llegado a América después de agosto del 2021. Así es, están en nuestro continente y les está costando mucho adaptarse al cambio porque todos les resulta nuevo y son invisibles para la mayoría de la población hispana y la iglesia.
Sin embargo, para aquellas familias afganas, invisibles en un país extraño, en medio de la confusión y el choque cultural, Dios diseñó una estrategia para alcanzarlos con las buenas nuevas. Desde hace ocho meses emprendimos la tarea de equipar a un grupo más de 20 voluntarios en el aprendizaje de su idioma y conocimiento de la cultura, con el fin de que ellos pudieran comunicarse con las familias y así emprender un programa de alcance a través de la enseñanza del idioma español e inclusión social.
Ya se han realizado actividades de integración con los niños y mujeres, en donde mediante celebraciones, historias de esperanza y juegos se está avanzando el relacionamiento para estrechar vínculos de amistad y así conocer un poco más de sus necesidades y realidades.
Nuestro siguiente paso es crear espacios y materiales para la enseñanza del español a los refugiados e incrementar el número de candidatos latinoamericanos equipados en el idioma y cultura, para así responder eficientemente a las necesidades y contribuir a la construcción de relaciones de convivencia y apoyo mutuo entre habitantes tradicionales y familias refugiadas.
Alcanzar a la población refugiada que ha llegado a nuestro territorio con las buenas nuevas es nuestra meta. Con su ayuda, nosotros podemos empezar un movimiento en el continente donde más candidatos se preparan para servir y donde surjan nuevas iniciativas para la extensión de Reino entre las naciones que han venido a nosotros.
Escríbenos a info@reflejo.org para saber cómo servir a la población afgana en América Latina.